Vacia....

vacia….
Como se exprime el jugo de un limón… como el fondo de una alberca casi vacía, el fuego extinguido, el sofoca miento de el calor de verano…. y mi vida irónicamente llena de cosas por hacer… pero yo sin hacer nada… y a veces casi vacía… no con un vacio desesperado, solo con un silenciosa falta de inspiración y plenitud…. Me sorprendo a mi misma, estática… mirando fijamente a la luz del día que viene y va… mañanitas pizpiretas, tardes cálidas y atardeceres casi frios… Mirando fijamente a las petunias moradas que adornan mi pequeño intento de jardín… terraza… o a veces me quedo estupefacta observado los frágiles dientes de león… los algodones que se creen flores…
Y yo pensando en el poder letal que un soplido de mi boca puede causar… y el placer mortal de lo inmortal…. cada porción del algodón deshaciéndose armoniosamente y graciosamente cayendo en el pasto… Para empezar de nuevo…
Mientras tanto, escucho el sonido del pájaro, quien presume ser libre…. y la lluvia…
entonces me imagino sus ojos… su voz y su risa cristalina… estruendosa, como las tormentas tropicales, fresca… y me imagino su aroma…. y su sabor a sandia…